De culto, independiente, raro. Varias son las descripciones para las películas que en realidad, la única característica en común que tienen es que simplemente están fuera del circuito comercial.
A les amantes del buceo cinéfilo muchas veces nos cuesta conseguir lugares, tanto virtuales como reales para disfrutar estas obras. A continuación, una breve reseña sobre seis sitios web en los que se pueden ver este tipo de audiovisuales. Una recomendación más allá de la chorrera de consejos que nos dan durante este aislamiento. Una recomendación por fuera de los tanques del streaming.
Mubi.com es garantía de calidad. Todas las películas que vi en esa plataforma no me decepcionaron. Tiene una curaduría impresionante. Mezcla clásicos con películas recientemente estrenadas y lo más interesante para mí, es que hay obras de países que difícilmente llegarán a Argentina con su filmografía. Si abrimos actualmente el portal vemos películas de Serbia, Bielorrusia, Canadá, Noruega, Portugal, Holanda, Dinamarca, Bélgica. También, de geografías más familiares a nivel audiovisual como Chile, Brasil, Estados Unidos e incluso Argentina. Sin embargo, acá podemos ver películas que no veríamos en Netflix, Amazon o Youtube.
Tiene un sistema que al principio puede parecer contraproducente en la cultura del video on demand. Mubi sube una película por día y la baja a los 30 días, por lo que siempre hay 30 películas para ver. No existe el “la veo luego”. Tiene algo de romanticismo en esta similitud con la cartelera de cine. Al ir cambiando, uno elige entre lo que hay y sabés que si no es ahora, quizás no la veas nunca. Entonces la ves.
La única desventaja que tiene esta plataforma es que hay películas que no tienen los subtítulos en español. Sin embargo, son las menos. Mubi ha ido mejorando en este aspecto y casi todas se pueden disfrutar en nuestro idioma.
Mubi es paga, pero muy barata. Tiene una suscripción mensual de $200
Dato importantísimo: es gratis para estudiantes y docentes de universidades de cine.
Tiene aplicación.
Última que vi: MS Slavic. Sofía Bohdanowicz y Deragh Campbell. Canadá, 2019
A www.lalulua.tv la encontré investigando a Miranda July. Había leído un libro de ella y luego descubrí una artista independiente y multifacética impresionante. Buscando audiovisuales de July, me encontré con esta página que podría definirla como un banco de contenidos audiovisuales relacionados al arte contemporáneo. Aunque es más entretenido leer como la definen sus creadores. Aquí algunos fragmentos de su presentación: “Un proyecto filatélico obsesivo compulsivo de curaduría videográfica”; “El criterio incluye registros dispares, miradas expertas sobre el arte y también amateur, ópticas absurdas, críticas bien o mal fundamentadas”; “funciona como un canal alternativo, basado en la piratería audiovisual, con fines tanto de procastinación, así como también didácticos”. Para mi la definición más descriptiva que hacen de elles mismes es: ”Un extenso archivo de material raro, imposible de encontrar en otros lados”.
Un dato importante de esta página es que funciona en gran parte gracias a Fansub, un grupo de fanáticos que se dedican a subtitular obras audiovisuales vinculadas al arte.
Tanto lalulula.tv como Fansub se sostienen gracias a donaciones de sus usuaries.
¿Qué podemos ver en Lalulua? Ficción, no ficción, semi ficción, cortos, largos, de autor y contenidos para TV.
Algunos son gratuitos y otros están habilitados solo para quienes hacen donaciones. Vale la pena investigar Lalulula.
No tiene APP.
Última que vi. Bauhaus, una nueva era. Lars Kraume. Alemania, 2019.
Llegamos a Zoomwoman, una página que tiene más pinta de pirata que Keith Richard, pero que su propio o propia creadora enseguida aclara: que es una colección personal, que no tiene cine comercial, que no es un negocio y que solo se limita a hacer accesible cine poco convencional, a reunir obras maestras del cine, a conseguir filmografías de directores tanto conocidos como infravalorados o malditos. Además advierte “a los vampiros de la SGAE y al resto de parásitos de la industria que aquí no se aloja ningún contenido protegido por copyright”.
La verdad es que llegué a Zoomwoman en busca de esos clásicos o películas de antaño que no se consiguen fácilmente y me encontré con mucho más. Películas contemporáneas no tan accesibles como las que acostumbramos a ver en las conocidas plataformas. Peruanas, portuguesas, colombianas, españolas, etcétera. De todas formas, para mí sus fuertes siguen siendo la calidad y la variedad de películas viejas. En la nube de tags que vemos ni bien entramos al sitio se leen nombres que lo dicen todo. Kiarostami, Varda, Buñel, Herzog, Kaurismaki entre otres.
Zoomwoman es gratuita y tiene la mayoría de las películas con opción de subtitulado o doblaje.
No tiene aplicación.
Última que vi: Alicia en las ciudades. Win Wenders. Alemania, 1974
El siguiente portal es Cine.ar. Para les que disfrutamos del cine nacional es una herramienta más que necesaria. Producciones argentinas de todos los tiempos y estilos habitan en esta página. Ficciones, documentales, animaciones, largos, cortos, series, web series se ofrecen en este portal gratuito. Lo único que cobra cine.ar es la posibilidad de ver los estrenos que en tiempo normales están en ese momento exhibiéndose en la salas. Estos estrenos salen solo treinta pesos.
Me gusta cine.ar porque me permite saber qué se está haciendo en el país a nivel audiovisual. Siempre me gustó ir a ver películas a los espacios INCAA, que son unas salas de exclusiva exhibición de cine argentino. Esperando que la de mi ciudad terminé su nuevo espacio, Cine.ar es mi propia sala de cine nacional.
Tiene aplicación.
Ultima que vi: Penélope. Agustín Adba. Argentina, 2018.
Otro sitio es legalmentegratis.com. Quizás no tiene grandes sorpresas, pero sí tiene cine de calidad y es muy cómodo. En realidad lo que hace esta página es seleccionar películas bajo algunos estándares cinéfilos y nos deriva a otras páginas que alojan la obra. Generalmente Youtube.
Un documental sobre candombe uruguayo, comparte el primer renglón con una película expresionista alemana de los años 30´ y La noche de los muertos vivos. A las características de calidad y comodidad, le podemos sumar variedad.
No tiene aplicación.
Última que vi: Rashomon. Akira Kurosawa. Japón, 1950.
Mi última recomendación es retinalatina.org. Una página que desarrollan entidades cinematográficas de seis países de Sudamérica, con el apoyo del Banco Interaméricano de Desarrollo (BID) y la UNESCO.
Si quieren ver películas de Sudamérica y el caribe, independientes y de buen gusto, este es el lugar. Cortos, largos, ficción documental, animación, divididos por países. Ecuador, Perú, Bolivia, Colombia, México, Uruguay y resto del mundo.
También tiene una sección de colecciones con temáticas como “cine experimental”, “de la escritura a la pantalla” y otras categorías que nos abren un panorama impensado del cine de nuestro continente.
Una buena forma de apuntar la vista a filmografía de países hermanos. Lugares de realidades tan distintas como similares a las nuestras.
Última que vi: Quehuaya. Anuar Elías Perez. Bolivia, 2017.
Por último me despido aconsejando una herramienta para les amantes de la legalidad. www.dondeloveo.com es una
Por último me despido aconsejando una herramienta para les amantes de la legalidad. www.dondeloveo.com es una página en la que con poner el nombre de la película nos dice en qué portal de los legales se puede ver.
Tiene APP.